En el corazón de la capital libanesa, Beirut, las antiguas calles de Achrafieh siempre han sido conocidas por la bella arquitectura de sus edificios y casas, casas que representan la historia arqueológica de Beirut y a las que los libaneses están muy apegados. Esta parte de Beirut fue la más afectada porla explosión del 4 de agosto de 2020. Hoy, caminando por estas calles desde hace más de dos años, seguimos viendo muchas casas destruidas y abandonadas.
Hay muchas razones detrás de estas trágicas imágenes que convirtieron a la ciudad en una zona de posguerra.
Una serie di causas
Como primera causa, está sin duda la crisis económica que ha afectado al Líbano en los últimos años.Esta crisis provocó un fuerte aumento de la pobreza, y la gente perdió todos sus ahorros en los bancos debido a la quiebra del gobierno. Para muchos de ellos, cuidar de sus familias, poner comida en la mesa y comprar ropa para abrigarse es más importante que arreglar la casa, aunque eso signifique tener que compartirla con sus padres, cuñado, suegra o incluso parientes, sobre todo para las familias que siguen cobrando según la antigua tarifa en dólares (1$ = 1. 500 liras libanesas), mientras que el coste de los productos de primera necesidad ha aumentado una media del 600% como consecuencia de las nuevas tarifas del "mercado negro", que son dieciocho veces superiores (1$ = 27.000 liras libanesas).
La bùsqueda de la justicia
En segundo lugar, el estado emocional de las personas afecta a la reconstrucción. Las repercusiones de la explosión siguen acompañando a los libaneses, para quienes es muy difícil superar lo sucedido. Y aún no se ha hecho justicia. Muchas personas se niegan a volver al lugar donde ocurrió todo; ya sea por el trauma causado o por la pérdida de seres queridos en ese día, en ese lugar. Además, es un hecho científico que las personas tienen una conexión emocional con sus hogares. Ese sentimiento de amor, satisfacción, felicidad y seguridad es común entre los libaneses, conocidos por su apego a su tierra y a los lugares que llaman hogar.
Ese día, todos los recuerdos de la infancia, las conversaciones por las tardes, las mañanas de café y las reuniones familiares se destruyeron junto con las casas, y las pesadillas, los pensamientos de ira, el llanto y el insomnio ocuparon su lugar.
El declino de Achrafieh
Además, a pesar de los esfuerzos promovidos por las organizaciones, entre ellas pro Terra Sancta, nunca es suficiente. Los daños causados superan la capacidad de todos y requieren un gran presupuesto para devolver la capital a su estado anterior. Además, el gobierno nunca ha reembolsado las pérdidas a los ciudadanos. Como resultado, muchas viviendas fueron abandonadas hasta que se asignaron los recursos. Y a medida que la situación se agrava, se está tardando más de lo previsto en terminar todas las obras.
Hay muchas razones para lo que vemos en las calles de Achrafieh en Beirut, pero las que acabamos de exponer son las más importantes. Es necesario actuar para que esta ciudad vuelva a florecer. Gran parte del patrimonio cultural está en peligro. La que fue la ciudad más prestigiosa del Líbano está ahora medio desierta. Como si lo que se perdió el 4 de agosto no fuera suficiente para la memoria de los libaneses, la ciudad está destinada a quedar marcada para siempre por las casas destruidas, los muros derrumbados y los cristales rotos. El extraño destino de la que hasta hace poco era la ciudad más rica de Oriente Medio, y que ahora se parece a Siria.