LÍBANO
La peor crisis en 150 años
La crisis en el Líbano no tiene precedentes: un drama político e institucional al borde del colapso que ha reducido a la población a una situación de pobreza sin escapatoria.
Dos años después de la explosión en el puerto de Beirut, el Líbano está de rodillas. Hoy en el Líbano no hay gasolina, no hay gas, no hay medicamentos y los ciudadanos reciben el mismo salario que en el período anterior a la crisis económica, pero el valor de la moneda ha caído dramáticamente.
La crisis en el Líbano hoy
La crisis de 2019, el covid y la explosión en Beirut han desencadenado una serie de acontecimientos que están sumiendo al Líbano muy rápidamente en una situación muy grave.
No hay más medicamentos
La atención médica libanesa está en crisis. Los farmacéuticos están en huelga y, por otro lado, el mercado negro tiene precios inasequibles para las familias. Hoy en día en el Líbano solo hay dos compañías farmacéuticas que producen y distribuyen medicamentos, el resto necesariamente debe importarse del extranjero, pero ahora la entrada desde el exterior también está bloqueada.
Dada la situación económica, muchos médicos se han visto obligados a abandonar el país. Esto causó la pérdida de numerosos especialistas en el Líbano, lo que resultó en la incapacidad de recibir y tratar a los pacientes.
El gas y la gasolina escasean
La crisis del petróleo provoca colas muy largas para las gasolineras. La falta de aceite cambia los ritmos de la sociedad. Además, esto conduce a una falta de generación de energía interna, causando la pérdida de energía durante el día, dejando a todo el país de cedro completamente en la oscuridad.
El colapso de la moneda
Los ciudadanos libaneses reciben ahora el mismo salario que en el período anterior a la crisis económica, pero el valor de la moneda se ha derrumbado dramáticamente. Si antes $1 correspondía a 1.500 libras libanesas y ahora vale 23.000. Ha habido un rápido aumento de los precios y una situación de enorme pobreza, no hay asistencia social.
Encendiendo la esperanza en el Líbano
Es vivir un mañana diferente a lo que Pro Terra Sancta se ha abierto Beirut en Franciscan Care Center (FCC), una realidad de asistencia psicosocial, donde son acogidos todos los días niños y ancianos que necesitan ayuda, apoyo o simplemente una presencia a su lado, y Trípoli a dispensario médico, donde se distribuyen medicamentos, pacientes acogidos y asegurados atención constante a los necesitados.